Guión

EL CUBO

Partiendo de un elemento tan simple y cotidiano como es: la “manguera”, nos plantearemos llegar a una forma reconocida por todos, pero que  por sí misma este elemento quizás no lo lograría. Mediante la ayuda de piezas, del mismo material pero de diferentes dimensiones, intentaremos parecernos a la forma de un Cubo, cuyo tamaño dependerá del jugador que lo construya.

Para llegar a cumplir con nuestro objetivo de formar el cubo vamos a partir de su forma básica, el cuadrado, el cuál mediante  repetición y disposición en diferentes ejes,  planos y unión de los mismos, se llega a constituirlo.

El juego consta de 12 piezas de un corte, 21 piezas de dos cortes, 3 metros del elemento “manguera”, y una base de 30 x 30. Es importante destacar que no se permite el uso de elementos externos a los mencionados anteriormente.

La mayor dificultad se encontró en lograr los cambios de dirección más próximos a un ángulo de 90 grados, los cuáles se lograron con una pieza de un corte, formando un “bucle” y un quiebre lo más parecido al ángulo necesario.

La pieza de dos cortes se utilizó principalmente para atar un plano con el otro y para la posible expansión del elemento cubo, repitiendo el mismo proceso.

El procedimiento que se siguió para la construcción del mismo es mediante un patrón de repetición.

En conclusión vemos que un material puede ser sacado de sus funciones primarias y transformarse en algo que no se espera de él, un objeto tan formal como un cubo; ya que dependiendo de la materialidad con la que se construya podrá dar una nueva espacialidad y llegar a una forma tan conocida. De material inestable transformarse en una figura geométrica regular.